IGLESIA CRISTIANA, CASA DE ORACION JEHOVA MI DIOS
Mpio. de Tenancingo 9, col. Izcalli Cuahtémoc 3, Metepec, Mex.
AÑO 2020, “PAZ EN LA TORMENTA”
PAZ PARA LA IGLESIA Y
TORMENTA PARA EL MUNDO
MATEO CAP. 8, VERS. 24: “Y he aquí que se levantó en el mar una tempestad tan grande que las olas cubrían la barca; pero él dormía.
25: “Y vinieron sus discípulos y le despertaron, diciendo: ¡Señor, sálvanos, que perecemos!”
26: “Él les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.”
Es imposible pensar que, en medio de una tormenta, alguien pueda estar en paz y mucho menos, que pueda dormir como si no pasara nada.
Esta es la enseñanza de nuestro Señor Jesucristo, que nos muestra que en medio de la tempestad y por fuertes que sean los vientos que soplen en contra de nosotros, Él tiene verdaderamente el control y la autoridad sobre la adversidad, por lo cual podemos estar confiados en que nada nos puede hacer daño si Él está con nosotros.
El año 2020 anuncia gran tempestad espiritual sobre la tierra y sobre México, principalmente por la falta de arrepentimiento de la gente que hace toda clase de mal y además por las leyes del gobierno que favorecen el aborto, las drogas, la homosexualidad, etc. en contra de la voluntad de Dios.
Dicha tempestad se manifestará a través de las fuerzas de la naturaleza como terremotos, erupciones, huracanes, tsunamis, deslaves, granizos, heladas, inundaciones, incendios, grietas en la tierra, etc. además de plagas como enfermedades incurables, epidemias, desempleo, carestía de alimentos, pobreza extrema, aumento de la delincuencia en narcotraficantes, robos, fraudes, asaltos, secuestros, conflictos de muchedumbres en contra de las autoridades de todos los países, provocando guerras, guerrillas y toda clase de mal que va a quitar la paz aun a las personas mas respetuosas y honestas que no deseen el mal a nadie.
Todo esto está profetizado en la Biblia como principio de dolores, antes de que vengan los terribles juicios de Apocalipsis y se ha hablado mucho sobre lo que ya está ocurriendo y que se está cumpliendo de una manera alarmante, ya que la sangre de nuestra gente está corriendo por las calles de nuestro país, sin que las autoridades hagan algo, ya que están mas preocupadas por su imagen y su poder que el dolor de la gente.
Nosotros mismos estamos siendo verdugos de nuestra propia gente cuando desobedecemos a Dios y nos ocupamos mas por nuestro bienestar material que la destrucción que ya estamos viviendo, debiendo orar, clamar, predicar su Palabra, buscando las cosas de Dios, antes de olvidarnos o ser insensibles a nuestra realidad.
Dios a pesar de todo, ha tenido misericordia de nosotros por su gran amor, porque estos juicios ya se hubieran cumplido mayormente, si no es que ha dado tiempo para ver si hay alguien entre nosotros que nos arrepintamos de nuestros pecados y volteemos la mirada a Él.
Pero, al contrario, en lugar de que haya arrepentimiento se ha multiplicado más la homosexualidad, el lesbianismo, las violaciones, los homicidios, el narcotráfico, la drogadicción, el alcoholismo, la pornografía, el aborto, el amor por los atractivos del mundo, la fornicación, el adulterio, el divorcio, la brujería, la hechicería, la santería, la adoración a la muerte, (que es enemiga de Dios, ya que atacó a nuestro Señor Jesucristo en la cruz del calvario), la idolatría, el amor al dinero y la fama, etc., etc., ya que todo esto el Señor lo prohíbe en su Santa Palabra, porque destruye al que lo practica y además daña a los que le rodean, no solo en esta vida sino también eternamente.
EL PROPOSITO DE LOS JUICIOS DE DIOS
La Biblia enseña que todos los castigos que Dios manda a la tierra son para que el hombre deje de hacer lo que le destruye y así, obedezca a Dios.
ISAIAS CAP. 26, VERS. 9: “Con mi alma te he deseado en la noche, y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque luego que hay juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia.”
Si la gente no fuera reprendida por Dios, se perdería por falta de corrección y Él no quiere que suframos sus castigos ni tampoco que vayamos al Infierno.
HEBREOS CAP. 12, VERS. 5: “y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, Ni desmayes cuando eres reprendido por él;”
6: “Porque el Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que recibe por hijo.”
Pero a los que no se arrepienten y persisten en hacer lo malo a pesar de la corrección que Dios les quiere dar, tristemente vendrán todos estos males aquí en la tierra y si aún no se quieren arrepentir, entonces su destino será después de esta vida, irremediablemente el infierno por toda la eternidad.
Romanos CAP. 6, VERS 23: “Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.”
1ª. de Pedro CAP. 4, VERS. 17: “Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?
18 Y: Si el justo con dificultad se salva, ¿En dónde aparecerá el impío y el pecador?
19 De modo que los que padecen según la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, y hagan el bien.”
VIENE TEMPESTAD ESPIRITUAL Y FISICA PARA EL MUNDO,
PERO PAZ AL PUEBLO DE DIOS
PERO PAZ AL PUEBLO DE DIOS
El que no se acerque a Dios conforme a su voluntad, el que viva superficialmente su Palabra como si fuera una religión en este año 2020, lo más seguro recibirá cualquiera de estos juicios y su salvación peligra si llega a morir.
Dios nos invita a reflexionar sobre todo lo que está pasando, que no es casualidad como muchos creen. Dios nos está avisando que vienen cosas terribles al mundo y a nuestro país y que la única forma de escapar de sus castigos es acercándonos a Él a través de su hijo Jesucristo y a cambiar todo lo que hacemos en contra de su voluntad que está escrita en la Biblia.
Dios promete que cualquiera que se arrepienta no le alcanzarán ninguna de las cosas que le están pasando a las personas que no conocen a Dios.
Quien quiere que violen a sus hijas, esposas o familiares, quien quiere que maten a uno de sus hijos o padres o hermanos, quien quiere morir en un terremoto, accidente o en una catástrofe, quien quiere sufrir un secuestro, quien quiere pasar hambre o desempleo, quien quiere sufrir un divorcio o desintegración familiar, quien quiere ver a uno de sus hijos en drogadicción o en homosexualidad, quien quiere sufrir enfermedades incurables y en pocas palabras quien quiere sufrir desmedidamente por cualquiera de estas causas.
La respuesta es muy sencilla, nadie quiere sufrir ni siquiera un poco, pero solamente sufren estas cosas los que no se acercan a Dios y los que no obedecen su palabra. Porque Dios ha prometido proteger a su pueblo y es imposible que alguien que tenga de veras a Dios en su corazón y en su vida le puedan suceder todos estos males.
Romanos CAP. 8, VERS. 1: “Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.”
ENTRA AL REFUGIO DE DIOS MIENTRAS PASA LA TEMPESTAD
Dice la Palabra de Dios, que mientras el castiga a la humanidad que no se quiere arrepentir; su pueblo, los que se arrepienten de sus pecados y reciben al Sr. Jesucristo como Salvador, los que viven su Palabra, los que entren en comunión con Él en obediencia, oración, ayuno y que se congreguen en las iglesias a las que Él los ha mandado que se reúnan sin faltar a una reunión, sin descuidar sus obligaciones materiales y familiares; recibirán esa protección de Dios y la seguridad para toda su familia.
Isaías CAP. 26, VERS. 20: “Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la indignación.
21 porque he aquí que Jehová sale de su lugar para castigar al morador de la tierra por su maldad contra él; y la tierra descubrirá la sangre derramada sobre ella, y no encubrirá ya más a sus muertos.
LA SANGRE DE CRISTO EN LAS PUERTAS DE LAS CASAS
En el tiempo del profeta Moisés, cuando fue enviado al faraón de Egipto para que dejara en libertad al pueblo de Dios y al negarse a hacerlo, Dios le mandó 10 plagas a su reino para quebrantar su orgullo y desobediencia, sin embargo, no fue hasta la última plaga, que dio la libertad al pueblo hebreo. Dicha plaga consistía en la muerte de todo primogénito tanto de hombre como de animal.
Pero al pueblo de Dios, le mando marcar con la sangre de un cordero las puertas de las casas para que cuando pasara el ángel de la muerte, no pudiera entrar a ellas ni hacerles daño. Y así fue, solo murieron los hijos de los egipcios y no así los de los hebreos, porque había señal de parte de Dios para que ni siquiera fueran tocados por la muerte. Al obedecer a Dios, poniendo la señal de la sangre del cordero, Dios los protegió.
Es necesario hacer notorio que las 10 plagas que Dios envió, ninguna tocó a su pueblo, porque esa es la protección que Dios da a los que le buscan y se arrepienten de sus pecados.
En este tiempo, va a suceder igual que en la pascua, los que no se entreguen al Señor Jesucristo, los que no se arrepientan de sus pecados y los que no quieran cambiar lo malo en lo bueno de sus vidas, no tendrán la protección divina y la muerte los visitará, no importando de tal o cual religión sea, porque las religiones no salvan, mas que el Salvador de la humanidad, el Señor Jesucristo.
Éxodo CAP. 12, VERS. 21: “Y Moisés convocó a todos los ancianos de Israel, y les dijo: Sacad y tomaos corderos por vuestras familias, y sacrificad la pascua.
22 Y tomad un manojo de hisopo, y mojadlo en la sangre que estará en un lebrillo, y untad el dintel y los dos postes con la sangre que estará en el lebrillo; y ninguno de vosotros salga de las puertas de su casa hasta la mañana.
23 Porque Jehová pasará hiriendo a los egipcios; y cuando vea la sangre en el dintel y en los dos postes, pasará Jehová aquella puerta, y no dejará entrar al heridor en vuestras casas para herir.”
SALVANOS QUE PERECEMOS
Haz esta oración y sálvate tú y tu familia:
“Señor Jesucristo hoy te suplico que me perdones todos mis pecados y me ayudes a tener esa paz que va a ser quitada de la tierra por todas las cosas que vienen. Por favor sálvame a mi y a mi familia que no nos acontezca nada malo y permíteme acercarme a tu refugio espiritual mientras dura la tormenta. Gracias porque ya lo hiciste. Amén.”
Te recomendamos orar y leer la biblia diariamente, acercarte a una iglesia donde no te enseñen religión y que obedezcas todo lo que dice la Biblia. Que Dios te bendiga siempre a ti y los tuyos. Amén.
Te recomendamos orar y leer la biblia diariamente, acercarte a una iglesia donde no te enseñen religión y que obedezcas todo lo que dice la Biblia. Que Dios te bendiga siempre a ti y los tuyos. Amén.
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