DIOS AMA A TU FAMILIA
                
  EL AMOR MAS GRANDE DESPUÉS DE DIOS...  
                                         
                           ...LA FAMILIA                 

                                                                             
         
       

                                                                                    

Es innegable que después de Dios, el amor más grande que hay sobre la tierra, es la familia, ya que ninguna relación afectiva tiene la intimidad y la fuerza como se da en el seno del hogar.
Esto es, porque las raíces que se forman con el paso de los años entre padres e hijos, esposos, hermanos, abuelos y nietos, primos, sobrinos y parientes, es a base de alegrías, lagrimas, luchas, dificultades, esperanzas, logros, éxitos, fracasos, errores, ofensas y perdones, satisfacciones, despedidas, reencuentros, enfermedades, convivencias, muertes de seres amados y tantos sucesos más, que reafirman y dan valor al verdadero amor. Sucesos que no pueden darse de igual manera en ningún lado como se dan en la casa y por lo tanto ningún amor puede ser semejante al amor que nace en ella.

Además, el haber recibido esa clase de amor que nuestros padres fomentaron en nosotros y que iba más allá de su propia hambre, dolor, enfermedad, frío e inclusive de su vida y que día a día se derramaba por el bienestar de sus hijos, sin importarles el sufrimiento que pudieran experimentar con tal de que nosotros no pasáramos ningún mal. Ese es el amor que Dios quiere que nosotros demos a nuestros seres amados y a nuestros semejantes, incluyendo a los que nos ofenden.
 
De la misma manera y aun sin haber hecho nada malo el señor Jesucristo, en la cruz del calvario nos amó tanto que no le importo sufrir y morir con tal de que nosotros fuéramos perdonados y tuviéramos la oportunidad de encontrar la felicidad en esta tierra, además de la vida eterna.

  

UN AMOR ETERNO

                                                            
 

Dice Dios en su Bendita Palabra así: Jeremías 31:3: “Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor ETERNO te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia”

Que maravilloso saber que el amor de Dios hacia nosotros es eterno y que nunca tendrá fin y que a las familias de la tierra las ha hecho igualmente con el mismo amor, que nunca acabará. De tal forma que podemos aspirar a reencontrarnos con muchos de nuestros familiares en ese lugar que Dios ha llamado Cielo, para seguir compartiendo y conviviendo con esos seres queridos por toda la eternidad, aún más allá de la muerte física que algunos hayan pasado. Y mientras eso llega, aquí en la tierra también podemos a aspirar a una restauración familiar como nunca antes se ha dado en toda la historia de la humanidad, por la promesa de Dios para todos los que se arrepientan de sus pecados y lo busquen con todo su corazón: “ Malaquías 4:6: El hará VOLVER el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición”

Esto es, no importando que los divorcios, la desintegración familiar y el desamor siga aumentando en la tierra y ni aun cuando lo haya sufrido ya alguien en su propia persona, ni siquiera, aunque parezca que todo haya sido destruido en una familia, puesto que Dios hace que haya manantiales en los desiertos, reverdezcan los árboles secos y también puede hacer que los corazones vuelvan a amar a pesar de que estén como muertos. El amor de Dios es poderoso e indestructible y el te ama a ti y a tu familia con este amor que nadie puede dar, más que ÉL.

 LUCHA POR TU FAMILIA


 

En este tiempo los divorcios, los rencores, los adulterios, las drogas, el alcohol, la homosexualidad, la violencia, la mentira, el aborto y muchas otras cosas más están atentando contra las familias de la tierra, por lo cual Dios está llamando a la gente al arrepentimiento de sus pecados y a un mayor acercamiento con ÉL, para prevenir que estas cosas no sucedan en las casas. Pidiéndole al hombre que se preocupe más de su vida espiritual que de las cosas materiales, que al final de cuentas son temporales, para que haga conciencia de la importancia que tiene la vida eterna y la familia y que permitan entrar a Dios en sus vidas protegiéndole de todos los males que hay en el mundo. Dios no quiere que las familias se destruyan ni tampoco que después sus miembros vayan al infierno, añadiendo un dolor eterno a todos los sufrimientos que la gente padece sin ÉL aquí en la tierra.
 
Es necesario prepararse con la Palabra de Dios, para saber cómo orar, como luchar contra Satanás, porqué perdonar a nuestros seres queridos que nos han ofendido y muchas otras cuestiones más que nos permitirán ayudar a nuestros seres amados que no conocen de Dios.
 
Dice Dios que no dejes que el enemigo destruya tu casa, sino que te levantes y tomes las Armas de Dios para poder vencer.
 
Perdona a tu esposa o esposo, perdona a tus hijos, perdona a tus hermanos, perdona a tus padres, búscalos, no dejes que el rencor los destruya, no dejes que la separación te venza, búscalos, no dejes que pase más tiempo, pelea la buena batalla de la fe, Dios te va a ayudar, tú no estás solo. Regresa a casa. Perdona al que se fue. Abraza a tu familia. Defiéndelos de la destrucción, platica con ellos, pide perdón y empieza de nuevo que no va a ser en vano, porque Dios está contigo.
 
No tienes por qué conformarte con la situación actual que estas pasando ante un problema familiar, porque el sacrificio de la cruz vale por la restauración familiar y por la vida eterna de tus seres queridos porque dice la escritura: “Hechos cap. 16 vers. 31: Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás SALVO, tú y tu casa”.
 
“Nehemías cap. 4, vers. 13: Entonces por las partes bajas del lugar, detrás del muro, y en los sitios abiertos, puse al pueblo por familias, con sus espadas, con sus lanzas y con sus arcos.”
“14 Después miré, y me levanté y dije a los nobles y a los oficiales, y al resto del pueblo: No temáis delante de ellos; acordaos del Señor, grande y temible, y pelead por vuestros hermanos, por vuestros hijos y por vuestras hijas, por vuestras mujeres y por vuestras casas.”
 
 No estás solo (a), Dios pelea esta batalla contigo, no la perderás y nunca te dejara.
“Deuteronomio cap. 3, vers. 22: No los temáis; porque Jehová vuestro Dios, él es el que pelea por vosotros.”


                                                                                   EL VALOR DE LA FAMILIA
 
                                                              

1.- La familia es insubstituible. - No hay forma de reponerla. Si se pierde, no hay reemplazo.
 
2.- La familia es parte de uno mismo. - Somos un solo corazón y no se puede dividir porque quedaría hecho pedazos y esto es muy doloroso y no hay cura para este dolor.
 
3.- La familia es el amor eterno expresado por Dios a nosotros aquí en la tierra. No es un amor pasajero.
 
4.- La familia no se puede perder. - Se puede perder todo en esta tierra, menos a Dios y a la familia.
 
5.- De nada sirve ganar con el evangelio a todo el mundo si se pierde nuestra familia.
6.- La familia es la única fuente de felicidad en la tierra y en el cielo, después de Dios, y sin la familia, es la mayor fuente de dolor en la tierra y en el infierno.
 
7.- Dios demanda que cuidemos nuestra familia aun con nuestra propia vida, es decir, puedo perder la vida, pero no a mi familia.
 
8.- Cuando hay una separación o divorcio, nadie gana todos pierden
 
9.- La lucha principal de nuestra fe no son los de la calle, son los de nuestra casa.
 
10.- El hecho que nuestros familiares no obedezcan el evangelio no los hace perder el parentesco que Dios nos ha dado, es decir no dejar ser nuestras esposas ni dejan de ser nuestros hijos y aun también Jesucristo no quiere que se pierdan y merecen también una oportunidad.
 
11.- Dios ha provisto este tiempo (no hay otro), para que la familia se reconcilie y él va a hacer todo lo necesario para que
12.- Cualquier creyente en Dios que luche por su familia, aun en las condiciones más difíciles e imposibles, Dios le va a respaldar para que la recupere.
 
13.- No es fácil esta labor, pero con una dedicación especial para la familia, volviendo la mirada a los nuestros, llenándonos de fe, amor y paciencia podemos esperar que estos cambios sucedan.


14.- La familia forma parte de la salvación, si se pierde la familia prácticamente se pierde la salvación.



                                                      ESTE ES EL TIEMPO DE LA RECONCILIACION FAMILIAR

                                                          

En el cual, el favor de Dios se va a manifestar sobre todas las familias puesto que él quiere familias restauradas y no desintegradas antes del rapto de la iglesia, que es la venida de nuestro Señor a la tierra por sus creyentes fieles y obedientes a su palabra.
 
Porque es necesario que sean restauradas todas las cosas antes de la venida de nuestro señor Jesucristo que esta hablada en el libro de los Hechos, capítulo 3, versículo 19 al 21:“así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del señor tiempos de refrigerio, y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado; a quien dé cierto es necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló dios por boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo”.
 
Es el tiempo del amor y del perdón, porque en el infierno ya no hay reconciliación y aun la maldición de que habla el profeta Malaquías se está desencadenando para los que no atienden este mandato de salvar sus casas, aquí en la tierra, expresado por Marcos en el capítulo 13 versículo 12: “y el hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y se levantarán los hijos contra los padres, y los matarán”

Esto habla de las consecuencias finales en la gran tribulación, (que es cuando el anticristo reine sobre la tierra y en este tiempo ya lo estamos viendo), para aquellas familias que no hayan entrado en la promesa de la restauración familiar.
 
Es una sentencia terrible, la cual se puede evitar cediendo a las contiendas, dando marcha atrás a los enojos, aceptando aun las humillaciones y las injusticias, perdonando aun las ofensas más inaceptables; en otras palabras, sufrir lo necesario con tal que persista la unidad familiar. A esto se le llama usar las armas espirituales de Dios haciendo el bien por cada mal que recibimos, considerando que por lo que se está por recibir, vale la pena pagar este precio, con tal de devolverle la sonrisa para siempre a cada uno de los que amamos.
 
Las ofensas y los enojos se pueden olvidar y Dios puede cambiar cualquier corazón por duro que sea, por lo tanto, podemos esperar grandes cambios en este año, Sí, hermano en este año esperamos grandes cosas de Dios, porque ya no hay tiempo, el tiempo se ha acabado y apenas podemos aprovecharlo en este mandato de Dios que es maravilloso porque podemos aspirar a disfrutar a nuestros seres amados como en un principio.

 

                                                           LAS IGLESIAS QUE ENSEÑAN UNA FALSA SANTIDAD

                                                                          

Es necesario mencionar que hay iglesias llamada de Restauración en las cuales, confunden el concepto de santidad y lo que el Señor Jesucristo nos ha enseñado en la Biblia, acerca de la familia, porque hablan de una santidad engañosa, la cual nadie puede vivir al 100% en la tierra, sino hasta que estemos en la presencia de Dios y juzgan como jueces inflexibles y sin misericordia a los que empiezan en el camino de Dios.
Todos somos pecadores y nadie es perfecto en la tierra, pero si podemos esforzarnos día con día en cambiar sin conformarnos en nuestros pecados y de esa manera ir quitando muchas cosas malas en nosotros, hasta que Dios nos llame a su presencia
 
Dice en la biblia que no hay hombre que no peque, y aunque no nos justificamos con esta palabra para pecar, Dios nos enseña un camino de perfeccionamiento constante haciendo que los hombres aspiremos a ser mejores mientras estamos aquí en la tierra, porque es necesario cambiar para entrar al reino de los cielos.
 
Por eso es importante considerar a los demás en sus debilidades y pecados, sin criticas ni juicios, como si nosotros mismos algún día llegaremos a fallar y quisiéramos que Dios tenga misericordia de nosotros.
 
Conozco no una persona de esas iglesias, sino varias, en las que tienen algo en común, todas tienen sus familias desintegradas y algunos de ellos hasta las han dejado porque no pueden aceptar el pecado de sus familias, juzgándolas en lugar de amarlas y ser pacientes con ellas como Dios manda.
 
En esto no hay testimonio y verdad sino solo tristeza por ellos porque habiendo conocido a Dios y su sana enseñanza han caído en el error de la religiosidad, destruyendo no solo sus propias vidas sino también sus casas.
 
No nos podemos engañar cuando alguien conoce a Dios, es imposible que no reciba restauración familiar, pero cuando alguien vive una religión, lo más seguro es que todo lo que tiene le será quitado, como dice la escritura.
 
Así como esto habría que platicar mucho acerca de la doctrina de estas iglesias, porque no han querido aceptar su error, y terminan maldiciendo a los demás ante su impotencia y falta de amor para esperar que Dios haga el cambio en los que se arrepienten. Sin embargo, se están propagando y contaminado a muchos verdaderos creyentes, a través de videos, audios, etc. envenenando sus corazones.
 
Para que la gente se salve es necesario que vaya acompañada de una sana enseñanza y su práctica verdadera, que sane las heridas del alma de cada persona creyente y después las de sus familias, para que así, se pueda llevar bendición a los demás.

 

ORACIÓN DE PODER

 

Por esta palabra, no aceptes más el estar distanciado de tu familia, no te niegues los abrazos y los besos de tus seres amados, lucha por ellos, deja que Dios haga un milagro. Haz una oración conmigo y dile al Señor fuertemente ahí donde tu estas que crees en ÉL y que quieres cambiar, siendo una persona mejor de aquí en adelante para retener y disfrutar para siempre a tu familia.
 
“SEÑOR JESUCRISTO, HOY ME ARREPIENTO DE TODOS MIS PECADOS Y TE PIDO QUE ME AYUDES PARA QUE MI FAMILIA SE SALVE, NO DEJES QUE SE DESTRUYA. YO TE ACEPTO COMO EL SALVADOR DE MI VIDA Y TE RUEGO QUE ENTRES EN MI CORAZON Y QUE NUNCA SALGAS DE AHÍ. POR FAVOR DIRÍGEME DE AQUI EN ADELANTE Y DAME FUERZAS PARA RESTAURAR MI CASA. GRACIAS SEÑOR, AMEN”
 
Creemos con todo el corazón que Dios ya hizo un milagro en tu vida por esta oración de fe. Por favor actúa, que todo, de aquí en adelante te saldrá bien. No desmayes, insiste en lo que Dios quiere que hagas y verás muy pronto los resultados, porque la palabra de Dios no puede retornar vacía. Que Dios te bendiga siempre a ti y toda tu familia. Amén.
 
COMO MANTENER UNA RELACION CON DIOS
La salvación que acabas de recibir por esta oración de fe se puede perder, pero tú puedes fomentar tu relación con Dios, de esta manera y te aseguramos que nunca más se romperá, haciendo lo siguiente toda tu vida:
 1.- Inicia una vida de oración diaria con Dios, platica con él como tu mejor amigo.
 2.- Lee la Biblia todos los días, no importa que sea una pequeña porción.
 3.- Obedece todo lo que Dios te muestre en su Bendita Palabra.
 4.- Busca un lugar donde te enseñen la Palabra de Dios sin religiones.
 Te aseguramos que siempre tendrás una vida en Victoria, hasta que el Señor Jesús venga por nosotros. ¡Qué dios te bendiga Siempre! AMEN Y AMEN.